Esta receta de calamar confitado es típica de la cocina almeriense y es una forma muy fácil de preparar el calamar que además es ideal para los niños ya que este queda muy tierno y sabroso.

Yo suelo prepararlo con calamares grandes, uno por persona, pero también se puede preparar con varios de los pequeños, lo único que variará es el tiempo de cocción en el aceite.

INGREDIENTES:


1 Calamar grande por persona (400g. aprox.)
3 o 4 hojas de laurel.
1 Cabeza de ajo
10 granos de pimienta.
Aceite de oliva
1 vaso de vino blanco.

PREPARACIÓN:


Empezamos lavando el calamar, le quitamos la pluma y la tinta (si se limpia de piel por fuera queda más bonito pero también pierde un poco de sabor por lo que yo prefiero dejarsela). Una vez limpio metemos el calamar en una olla con el laurel, los dientes de ajo sin pelar, la pimienta y un poco de sal. Por último añadimos aceite hasta cubrir los calamares y añadimos el vaso de vino.

Tapamos la olla y la ponemos a fuego flojo sin dejar nunca que empiece a freír, si tenemos termómetro de cocina procuraremos no pasar nunca de los 80º, a mitad de cocción le daremos la vuelta. El tiempo de cocción variará en función del tamaño de los calamares pero aproximadamente en 30 minutos estarán listos, pero el mejor reloj es a ojo comprobar cuando están tiernos pinchando con un tenedor o cuchillo.

Si se quiere se puede servir con un ajiverde (ajo y perejil picados en fino)  preparado con el aceite de la cocción del aceite y añadir por encima al calamar.