POTAJE DE LENTEJAS


Las lentejas son quizá la legumbre que más nos ha perseguido desde niños, todos recordamos a nuestra madre persiguiéndonos con una cucharada de estas recordándonos la cantidad de hierro que tenían y lo buenas que eran. Aunque a pesar de que muchos de niños las odiábamos con el tiempo hemos empezado a apreciarlas y bien preparadas realmente resultan un manjar. Esta forma de hacerlas es similar al potaje de habichuelas o garbanzos que ya puse en su día, varía tan sólo el tiempo de cocción que para las lentejas es un poco menor.

Como todos los potajes, al principio cuesta un poco cogerles el “tranquillo” a la olla y a las cantidades de agua, así que no te desanimes si la primera vez no te sale todo lo bueno que debiera seguro que cuando pongas en práctica la receta un par de veces más mejora considerablemente. Como truco puedo decir, que lo que más sabor aporta es el sofrito de tomate, pimiento y cebolla, por lo tanto no te quedes corto con este, siempre es preferible echar un poco más de lo indicado que quedarnos cortos.

En este caso las cantidades, no son para uno o dos platos, si no para bastante más, ya que por lo general aprovecho y hago una cantidad considerable y el resto lo congelo para usarlo en otra ocasión, ahorrándome  cocinar ese día, por tanto estas cantidades pueden rendir para 6 u 8 comensales o almuerzos según se mire.

INGREDIENTES:

½ kg de lentejas.
1 trozo de Morcilla
2 trozos de chorizo de guiso.
2 hojas de laurel.
½ cucharadita de comino molido.
½ cucharadita de pimentón (picante si se desea)
1 patata pequeña.
Aceite de oliva usado. (si no tienes fríe un par de ajos y usa ese aceite)
2 Tomates rojos.
1 pimiento verde de freír
1 cebolla
3 dientes de ajo.
1 pimiento choricero (opcional)

PREPARACIÓN:

La noche anterior, dejamos las lentejas en remojo, cubriéndolas por completo de agua. Deben estar al menos 12 horas y no más de 24, y usarlas a continuación. Si por cualquier motivo después de ponerlas en remojo no las podemos usar, podemos congelarlas y usarlas más adelante, en caso contrario si se dejan a temperatura ambiente terminarán por germinar.

Empezamos haciendo un sofrito con el tomate, el pimiento, la cebolla y el ajo todo picado fino. El tomate muchas veces los troceo tal cual, pero si se desea se pueden pelar, la forma más sencilla es hervir un poco de agua y meter los tomates 20 segundos en el agua, y se desprenderá fácilmente  la piel.

Una vez tengamos toda la verdura picada, la ponemos en la sartén con un poco de aceite (3 o 4 cucharadas soperas) y sofreímos, durante 15 o 20 minutos. Con ayuda de una batidora trituramos todo el sofrito y lo reservamos. Si tenéis espacio en el congelador un buen truco consiste en hacer mucha cantidad de sofrito, dividirlo en las cantidades necesarias y congelarlo, ahorrándonos así mucho tiempo a la hora de preparar futuros potajes, ya sean de lentejas, habichuelas o  garbanzos pues todos utilizan la misma base de sofrito.

En la olla express (también se puede usar olla normal, pero el tiempo de cocción y el agua necesaria aumentan) echamos las lentejas escurridas, otras 3 o cuatro cucharadas de aceite,  troceamos la morcilla y el chorizo (estos es conveniente no estén muy blandos para que no se deshagan), el laurel, el comino y el pimentón. La patata la pelamos y la hacemos dos o tres trozos y lo añadimos todo. Si se desea se puede usar un pimiento choricero que previamente habremos dejado en remojo 15 o 20 minutos para que se hidrate; con ayuda de un cuchillo raspamos la pulpa interior de este y la añadimos también a la olla. Por último añadimos agua hasta justo cubrir las lentejas y añadimos el sofrito y mezclamos todo bien. Si usamos olla express, es conveniente no añadir demasiada agua ya que el sofrito ya aporta bastante líquido y la olla no suele consumir mucha, es preferible tener que añadir un poco más después que quedarnos largos.

Una vez todo dentro de la olla, cerramos esta y la ponemos a fuego fuerte, cuando la olla empiece a “pitar” bajamos el fuego lo ponemos a la mitad o así y dejamos unos 12 minutos. Tras esto despresurizamos la olla, añadimos sal poco a poco hasta que esté al gusto y continuamos cociendo unos minutos hasta que las lentejas estén tiernas. Si es necesario podemos añadir un poco de agua, pero esta tiene que estar caliente.


4 Amigos dejaron su comentario (Gracias!):